Los hilos invisibles que nos mantienen prisioneros.

El dinero y nuestro presente
La familia define qué es el dinero, le da un adjetivo y restringe si se nos
permite ganar o no, dinero y de qué manera.

Pero lo más importante, es
que lo que nos pasa con respecto a esto, nos da la oportunidad de resolver lo que ha quedado inconcluso, para nuestros antepasados, al mirarlo con amor, liberamos, nos liberamos y a las futuras generaciones.

A nivel de los padres, la neurosis del
fracaso, la carencia, el “no soy capaz” o, la caridad  también puede impedir la prosperidad económica en algunos
miembros del clan.

Cuando los padres imponen una prohibición, falta de reconocimiento o, no creen en sí mismos, eso,  nos impide superarlos, “si yo no tengo dinero, tú no lo tendrás”. De esta manera, el hijo nunca lo superará debido a Lealtad,  miedo, o,  lo toma como natural (de forma inconsciente) la situación económica de sus padres.

Se dice que nuestro cerebro más primitivo, el
REPTILIANO, es el cerebro que controla el territorio, la comida y la
descendencia. ¿También controlas el dinero?
Sí el dinero proporciona estas tres necesidades básicas. En el momento en
el que creemos que nos falta, nos genera estrés y angustia. Las creencias
implantadas por nuestros padres se vuelven creencias que revivimos una
y otra vez, sintiendo lo que ellos sintieron y por consecuencia hacemos la
misma acción llevando no a un mismo resultado. 

¡Tu perteneces aquí!