La relación con papá es la puerta a través de la cual entramos en pertenencia, a la comunidad y en nuestro ‘encaje personal’ se podría decir que el padre es el que da permiso a dicha pertenencia, a través de un trabajo, el contexto familiar de los niños, la ubicación geográfica de un hogar y más.

Idealmente, llegaríamos a la edad donde entramos a los arquetipos de la Doncella y luego de la madre, entraríamos en nuestro ‘Castillo’ metafórico, para dar riendas sueltas a nuestros sueños, cuidar de las cosas y ser atendidas. Todos tenemos un patrón en nuestra psique: un cableado para tener un lugar soberano en el mundo. Por ser valioso dentro del sistema más grande, no solo como El Héroe por sí misma, sino por ser realmente valiosos dentro de un sistema donde hay otros con quienes interactuar y lugares donde debemos ‘pertenecer’.

Cuando llegamos a la edad de la doncella y madre con un masculino herido,

• Llevamos una herida con papá que influye en:
• Nuestra propia confianza.
• Estamos aterrizadas ante nuestra propia y verdadera autoridad.
• Nos impide tener una relación con nuestro poder que se basa en nuestros propios dones únicos.
• Nos impide encontrar nuestro camino de vida y tomar nuestra misión
• Saber crear estructura y orden
• Saber cómo construir los sistemas y estructuras desde nuestros dones y que se mantenga en el tiempo.

La Vasija Madre es el útero y el contenedor dentro del cual se gestan las cosas. Sin embargo, la nave que contiene a la vasija es el Padre. Si esa nave no es firme o no está sosteniendo la vasija, nosotras como hijas, perdemos la fuerza, y la autoridad. Tiene que estar construido de la manera correcta para que cualquier movimiento en la vida tenga lugar y podamos seguir nuestra vida de una manera sana y firme.

Dado que nuestro planeta ha estado dentro de una construcción masculina de integridad durante más de 3.000 años, nos ha aportado muchas cosas desde una perspectiva evolutiva. El Arquetipo del Padre entró en la cultura durante una época en la que era necesario construir sistemas y estructuras: los monarcas comenzaron a surgir, en la era moderna la mente racional entró con fuerza. Ciertamente no diríamos que este fue el desarrollo “incorrecto”. Y, sin embargo, para las mujeres, lo que ha sucedido en esta gran extensión del Arquetipo del Padre, es que ha habido una ‘Herida del Padre’ cultivada y transmitida de generación en generación.

A través de la investigación con cientos de mujeres en nuestros Programas Mujeres holísticas, la mente inconsciente y, consciente mantuvo esta creencia limitante:

La creencia central limitante del Padre

“No pertenezco.”

 Al biodescodificar, la mayoría de las mujeres manifestaron su emoción oculta o “dialogo mental recurrente” como: “No importa cuánto lo intente, no puedo encajar en este patrón que enfatiza y valora:

• La mente racional por encima de la intuición
• Orden sobre flujo libre
• ‘Mi’ grupo sobre ‘tu’ grupo
• Pertenecer y encajar en las reglas de esta forma de ser, si quiero que me cuiden “.

Esto, nos ha llevado a las mujeres a un colapso de nuestra propia autoridad. Y en un momento, más que nunca antes, en el que necesitamos apoyarnos en el terreno de nuestro propio valor (El Arquetipo de la Madre ‘Sé que soy suficiente tal como soy’ ). Pero no podemos mostrar nuestro sentido de suficiencia, si aceptamos la creencia limitante de que no pertenecemos al mundo. ¿Cómo se manifiesta esta creencia limitante en su vida o se siente en su cuerpo cuando la habla en voz alta?

Cuando llevamos un masculino herido dentro, o una herida con papá y no importa las circunstancias, pueden ser reales o simbólicas, las formas en que esto se manifiesta para las mujeres a menudo incluyen:

• El súper intento, desesperado para pertenecer
• Encajar pase lo que pase
• Convertirse en ‘uno de los chicos’
• Juzgando a otros que no pertenecen
• Renunciar incluso a tratar de encajar, porque siente que nunca lo hará
• Rechaza tanto el sistema, que vive al margen y no respeta su necesidad de estructura para crear una contribución sostenible
• Incapacidad para atraer, construir o mantener una pareja saludable
• Falta de entrega desde el corazón en su sexualidad

Muchas mujeres que han trabajado muy duro para encajar en esta estructura de poder patriarcal hiper-masculina pueden ser muy críticas, duras y no recurrir a mentores de otras mujeres, o pueden intentar guiarlas para que sean ‘uno de los niños’ (mujeres masculinizadas)

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